Cuando Graham Bell inventó el teléfono, nunca imaginó que su instrumento para hablar a distancia podría adquirir tantas formas y colores, ajustado al gusto de cada uno. Ya no tienes escusa para dejar que algo tan habitual como mantener una conversación telefónica se convierta en algo rutinario y aburrido.
Este teléfono simula un precioso piano de cola negro, que se sostiene sobre sus patas y cuyas teclas van numeradas para el marcado telefónico. Puedes abrir su tapa y cada vez que te llamen su bastidor se iluminará gracias a unos Leds. Encaja a la perfección en tu despacho o en el salón de casa, donde dará un toque de elegancia único.
¡Si eres amante de la música clásica este es tu teléfono!